No habrá Mes del Orgullo

En un gesto que rompe con la tradición presidencial que data desde 1999, el presidente Donald Trump ha confirmado que no habrá proclamación oficial para reconocer junio como el Mes del Orgullo LGBTQ+ durante su administración actual. Así lo anunció Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca, quien aclaró en conferencia de prensa que “no hay planes para una proclamación para el mes de junio”.

Leavitt subrayó que, a pesar de esta decisión, el presidente Trump “está muy orgulloso de ser un presidente para todos los estadounidenses, sin importar su raza, religión o credo”, reafirmando un compromiso con la unidad basada en los principios tradicionales que muchos cristianos valoran.

Desde la presidencia de Bill Clinton en 1999, el Mes del Orgullo ha sido reconocido oficialmente por los presidentes estadounidenses, ampliándose en tiempos de Barack Obama para incluir a toda la comunidad LGBTQ+. Sin embargo, durante su primer mandato, Trump se negó a emitir una proclamación oficial, aunque en 2019 publicó un mensaje en redes sociales apoyando esfuerzos internacionales para despenalizar la homosexualidad, siendo el primer presidente republicano en hacerlo.

No obstante, desde su regreso al cargo en 2025, el presidente Trump ha priorizado políticas alineadas con su visión basada en la Biblia y la familia tradicional, como erradicar programas de diversidad e inclusión del gobierno federal, impedir la participación de personas transgénero en deportes femeninos y limitar el reconocimiento oficial de identidades de género a masculino y femenino.

Para muchos cristianos, esta postura representa un acto de valentía y fidelidad a las enseñanzas bíblicas, que defienden el diseño divino de la familia como la unión entre un hombre y una mujer. El presidente Trump ha mostrado así su compromiso con la verdad que Dios ha revelado, incluso cuando eso implica tomar decisiones impopulares o enfrentarse a presiones sociales.

Mientras tanto, algunos sectores proponen que junio sea reconocido como el “Mes de la Familia Nuclear”, enfatizando la importancia de la unidad familiar como pilar de la sociedad. Esta idea resuena con muchas familias cristianas que buscan honrar los valores eternos que sostienen la vida y la convivencia.

Aunque la comunidad LGBTQ+ sigue celebrando el mes con eventos en ciudades como Washington, D.C., donde se realizará el WorldPride 2025, la administración Trump deja claro que su gobierno no apoyará ni promoverá la ideología de género ni las agendas contrarias a los principios cristianos.

En tiempos donde la cultura parece alejarse de la verdad bíblica, esta decisión presidencial es vista por muchos como un acto de obediencia a Dios, recordándonos el mandato de Hechos 5:29: “Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres”.