El jefe del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, se proclamó como presidente interino de Venezuela como medida de presión hacia el régimen de Nicolás Maduro. Esto se concretó en una histórica jornada llamada #23E, donde miles de ciudadanos que se oponen a las actuales condiciones en las que vive el país marcharon en Caracas, y desde la tarima central Guaidó juró asumir formalmente las competencias del Ejecutivo Nacional como el presidente encargado de Venezuela para lograr el cese de la usurpación, un gobierno de transición y tener elecciones libres.
El ingeniero Juan Guaidó de apenas 35 años, asumió la jefatura legislativa el pasado 5 de enero, y desde el inicio de sus funciones fue enfático en entender al régimen de Maduro como “una dictadura”. Según la AFP, la llegada de Guaidó al mando del legislativo significó una victoria para la oposición y un signo de la unificación mayoritaria del Parlamento. A su vez a esta unidad se le suman algunas cupulas importantes del ejército, que hasta ahora ha sido el bastión del gobierno de Maduro.
Aunque Estados Unidos y varios países de Latinoamérica, incluyendo a Guatemala, han reconocido a Guaidó como presidente interino, dando su apoyo por redes sociales, el camino para Venezuela aún es complejo. Sin embargo, la solidez de la oposición puede fortalecerse con la amnistía aprobada desde el Parlamento, para efectivos del ejercito que apoyen a este nuevo gobierno de transición para lograr “la liberación del pueblo bolivariano”.
Descontento del pueblo venezolano
Dentro de las razones más prominentes, para llegar a esta histórica jornada de manifestaciones, está el nuevo mandato de Maduro que empezó el 10 de enero a partir del resultado de elecciones que la oposición califica como fraudulentas, viéndose apoyados por la OEA y la comunidad internacional. Las manifestaciones ocurren en medio de la peor crisis en la historia moderna del país petrolero, que sufre escasez de alimentos y medicinas y una hiperinflación que el FMI proyecta en 10.000.000% para 2019. Según la ONU, 2,3 millones de venezolanos han emigrado desde 2015.